El informe aparecido en El Comercio acerca de la venta de expedientes en el Poder Judicial pone sobre el tapete la urgencia de contar con hombres y mujeres honestos, íntegros e incorruptibles que se encarguen de la adminstración de los archivos (no sólo de los archivos centrales sino también de los archivos periféricos). Pero, no es suficiente que las entidades cuenten con archiveros probos, bien remunerados y técnicamente capacitados. También las instituciones deberían brindar a los archiveros todo tipo de facilidades: un local amplio, seguro y bien ubicado; estantería metálica, cajas de archivo, equipos de filmación de todos los ambientes del archivo las 24 horas; equipos informáticos para controlar el ingreso, salida y devolución de los expedientes; equipos para preparar los back up de los documentos (en este caso de los expedientes) utilizando el microfilm y la digitalización, etc.
¿Qué informa El Comercio?
"La tarifa para desaparecer un expediente varía de acuerdo con el caso. Lo de tráfico de drogas, robo y estafa, cuestan más que otros delitos, aproximadamente 5,000 dólares por tomo...
Si los involucrados son influyentes y relacionados con el poder, el precio crece considerablemente, 10,000 dólares por tomo, lo que incluye una especie de seguro laboral para el que ejecuta el robo, casi siempre un corrupto empleado del juzgado...
...cuando un expediente corresponde a un caso muy sensible, es guardado por el Secretario del Juez: "Pero no hay problema, igual lo desaparecemos. Por eso digo que se arma un escándalo". La fuente prosigue: "Apenas cayó la mafia (fujimontesinista), vino un tipo para ofrecer 100,000 dólares por la desaparición de 10 expedientes por estafa y robo, donde estaban relacionados algunos políticos y empresarios".
La seguridad de los expedientes es deficiente. El Comercio conversó con un trabajador del poder judicial que tiene a su cargo 6,000 legajos, una cifra realmente inmanejable. ¿Cómo asegurarse de que uno de ellos no vaya a ser adulterado, desaparecido o fotocopiado? Habla el atormentado arhivero: "Es imposible proteger todos esos expedientes. Se pierden y no nos damos cuenta". Ahora, si el proceso ha culminado y el expediente se encuentra en los archivos del Poder Judicial, ya sea en el Palacio de Justicia, en el ex- Ministerio de Educación o en las oficinas del Jr. Ancash, el costo se reduce considerablemente: entre 10,000 y 15,000 soles por desaparición..."
Diario El Comercio, 07-08-05